Cuando alguien se decide a iniciar un proyecto empresarial, actualmente tiene muy claro que uno de sus campos principales de actividad va a ser la web. Los esfuerzos se focalizan en lograr obtener una web o un site atractivo, y bien posicionado para alcanzar la máxima visibilidad posibles. En múltiples conversaciones con nuevos emprendedores ves en ellos su clara visión y preferencia por esta estrategia de marketing y difusión. Pero... ¿es esto suficiente?, esa es la pregunta que debemos hacernos enun contexto con multitud de proyectos intentando abrirse paso en la jungla digital está claro que la clave va a ser conseguir destacar.

Para ello es vital utilizar todas nuestras herramientas a nuestro alcance. El inicio de un proyecto web es duro y complicado, siendo uno de los principales objetivos el lograr la difusión adecuada para llegar a nuestro nicho de mercado. Dicho así parece fácil, pero es más complicado... vivimos en un estado permanente de sobreinformación con multitud de fuentes y recursos que distraen nuestra atención, lo que nos deja una ventana ciertamente reducida de tiempo para captar la atención de nuestro cliente.

No podemos esperar que el cliente acuda a nosotros, como en el mundo físico, sino que debemos ir a por él. Y en este caso, esta acción debe enmarcarse dentro de lo que se conoce un Plan de Marketing Digital que nos permita dosificar y administrar nuestros recursos para lograr la máxima difusión posible de nuestro producto o servicio. Para ello tenemos una herramienta como jamás las habíamos visto... las Redes Sociales. No tenemos que preguntarnos dónde está nuestro cliente. Lo sabemos, lo único que tenemos que saber es la manera más apropiada de acceder a él y presentarnos adecuadamente.

Así que vamos a hablar de estrategias adecuadas de comunicación digital e interacción con redes sociales de nuestros proyectos web

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